Además de servir de soporte para las piezas dentales, las encías protegen la raíz del diente de la acción de agentes externos dañinos. Por ello, juegan un papel fundamental en la salud bucodental de cada persona. Pero ¿qué ocurre cuando las encías están retraídas? En este post, te contamos en qué consiste el tratamiento de injerto de encía y cómo es su recuperación. Si quieres conocer más información, ¡sigue leyendo!
¿Por qué se retraen las encías?
La recesión de encías es un síntoma que consiste en la pérdida de tejido alrededor del diente, dejando al descubierto gradualmente una mayor cantidad de superficie dental. Si no se trata a tiempo, esta retracción podría repercutir en el hueso sobre el que se soportan los dientes, provocando movilidad dentaria y afectando a su estabilidad. Las principales causas por las que se retraen las encías son:
- Enfermedad periodontal (gingivitis o periodontitis).
- Cepillado agresivo.
- Hábitos nocivos como, por ejemplo, fumar.
- Asimismo, las encías están más sensibles en determinados periodos como el embarazo.
¿Qué es el injerto de encía?
El injerto de encía es una microcirugía que representa la mejor solución para recuperar la encía dañada, evitando posibles problemas que podrían derivarse de esta retracción. Esta técnica mínimamente invasiva consiste en extraer una pequeña cantidad de tejido blando, generalmente del paladar del paciente, con el objetivo de colocarlo en la zona en la que la encía está retraída.
Gracias a este procedimiento, el paciente podrá recuperar la salud y la estética de sus encías y, por tanto, de su sonrisa. Además, minimizará el riesgo de perder los dientes y desaparecerán síntomas como la sensibilidad dental.
¿Cómo es la recuperación?
Después de llevar a cabo esta sencilla microcirugía, te recomendamos seguir estas recomendaciones:
- Tras la cirugía, aplica hielo durante 4 o 5 horas para reducir las molestias.
- Evita practicar deporte y esfuerzos durante la semana posterior a la intervención.
- Sigue una dieta basada en alimentos blandos y templados o fríos los dos primeros días.
- Enjuágate con colutorio de clorhexidina durante, al menos, 15 días. En este sentido, debes tener cuidado los primeros días y no hacer demasiado esfuerzo para evitar el desplazamiento del injerto de encía.
- Evita el tabaco, tanto por el bien de tus encías como por tu salud general.
- Mantén una adecuada higiene bucal.
Además de ser rápida, sencilla y económica, este tipo de microcirugía le devuelve la salud y la estética a la sonrisa del paciente. En Clínica Dental Redondo y Cardoso llevamos a cabo esta técnica mediante anestesia local, evitando que el paciente sufra las mínimas molestias posibles.
Si tus encías están retraídas, acude a nuestra clínica dental y nuestro equipo de dentistas especializados en periodoncia te examinará y establecerá el tratamiento más adecuado para ti. Si quieres conocer más información al respecto, no dudes en contactar con nosotros.