Los tratamientos de ortodoncia invisible están compuestos por una serie de alineadores plásticos hechos a medida para cada paciente. Los alineadores se van cambiando progresivamente para conseguir, paso a paso, la posición deseada forzando al diente, a través de micromovimientos, a adoptar la posición configurada en el alineador.
El paciente lleva los alineadores en todo momento, salvo durante las comidas, el cepillado y demás procedimientos de higiene dental.
Entre otras virtudes de este tipo de tratamiento, el primordial es que es menos visible y más cómodo a efectos prácticos si se compara con otros métodos de ortodoncia clásicos (como los brackets linguales o vestibulares). Sin embargo solo alinean los dientes por lo que a este tipo de aparatos se les llama alineadores, y al tratamiento realizado con ellos, pues al no permitir el encaje recíproco de los maxilares, no permiten la correcta oclusión.
El tratamiento comienza con una toma de impresiones y registro de la oclusión (forma de morder del paciente), además de un adecuado estudio radiográfico y fotográfico. Mediante tecnología digital avanzada de procesamiento de imágenes, se transforman los modelos del paciente en una imagen digital en tres dimensiones de gran precisión. A continuación, se crea una secuencia de tratamiento individualizado para cada paciente.
Los brackets de zafiro son una solución altamente estética para aquellos pacientes que quieren corregir la posición de sus dientes sin recurrir a los antiestéticos métodos de ortodoncia metálica tradicional.
El blanqueamiento dental es un tratamiento dental estético que logra reducir varios tonos el color original de las piezas dentales, dejando los dientes más claros.